Cocaína
Es un estimulante de acción rápida, intensa y de corta duración que habitualmente la encontramos en forma de polvo para ser esnifada o fumada. Es una sustancia con un elevado potencial de adicción psíquica, aunque también lo puede generar en menor grado a escala física. Durante mucho tiempo la cocaína se popularizo entre las clases sociales más acomodadas e influyentes. La creencia que se trata de una droga segura y la aparente ausencia de riesgos al consumirla le han valido sobrenombres como “la droga de los ejecutivos” “el champán o caviar de las drogas” el polvo de oro”, etc.
EFECTOS:
SUBIDA, COLOCÓN, PELOTAZO.
- La subida se presenta en cuestión de segundos, difícilmente dura más de media hora.
- Su intensidad depende de la potencia de cocaína, de la frecuencia del consumo, del entorno y del nivel de tolerancia del consumidor.
- Se dilatan las pupilas, aumenta el ritmo del corazón, la respiración y la temperatura del cuerpo.
- Provoca una sensación de euforia y bienestar.
- El consumidor se siente con más fuerza y mayor capacidad de concentración e imaginación.
- La vida parece color de rosa: el estrés y la ansiedad desaparecen.
- Incrementa el nivel de energía; causa deseos de estar activos, charlar, reír y bailar.
- Todo lo que se dice parece acertado: las opiniones, aunque sean injuriosas, son consideradas adecuadas, y las bromas, increíblemente graciosas, aunque no lo sean.
- Se pierden las inhibiciones; algunos sienten excitación sexual.
BAJADA, BAJÓN, CAIDA.
La bajada aproximadamente llega a partir de la media hora. Van disminuyendo los efectos anteriores y aparecen otros de sentido contrario. El costo de la euforia instantánea e intensa es un abatimiento repentino y profundo que sobreviene rápido y golpea fuerte.
- Al desaparecer los efectos aparece la apatía, decaimiento, cansancio o agotamiento, sueño, impotencia sexual y síntomas de ansiedad o depresión.
- Muchos se ven tentados a combatir la bajada tomando más cocaína. Esto provoca otro efecto inicial, pero es menos intenso y no dura mucho. Los efectos de la coca suelen durar poco rato, querer continuar subiendo puede provocar que el efecto de bajada siguiente sea más fuerte y profundo.
- Si se ha consumido una dosis alta, se puede comenzar a actuar de manera extraña y violenta.
TOLERANCIA Y DEPENDENCIA.
- El principal peligro de la cocaína es que genera una fuerte dependencia psicológica.
- El consumo de cocaína genera una rápida tolerancia, que hace que se tenga que aumentar la dosis para conseguir los mismos.
- El consumo prolongado de cocaína causa terribles efectos colaterales.
- Se puede presentar síntomas de una enfermedad mental grave denominada psicosis cocaínica. Ideas delirantes: sentimientos delirantes de ser perseguido-a y controlado-a acompañados de alucinaciones, hiperexcitación y angustia. Las personas a quienes la cocaína les hace un efecto paranoico o alucinatorio, que puede degenerar en un comportamiento violento o antisocial, deben abandonar el consumo, por su propio bien y por el de los demás.
- En usuarios habituales, la supresión brusca del consumo puede provocar estados de somnolencia y depresión, con posible aparición de ideas de suicidio.
- Insomnio crónico. Dormirse convierte en algo pesado.
- Perdida de peso, generado por la falta de apetito.
- Los hombres pueden perder capacidad para tener o mantener erecciones.
- Molestias nasales. Esnifar ulcera el tabique nasal y puede llegar a perforarlo.
- Un efecto a largo plazo del consumo de cocaína es la perdida permanente de dopamina, un neurotransmisor básico para mantener el equilibrio del cerebro.